Responsabilidad y Amor: Ser Verdaderos Hijos de Dios

Un hijo de Dios responsable es aquel que actúa conscientemente, siendo él la causa directa o indirecta de un hecho ocurrido. Está obligado a responder por alguna cosa o por alguna persona y también es el que cumple con sus obligaciones o que pone cuidado y atención a lo que hace o decide. [00:01:43]

Hay una diferencia en nosotros. Nosotros somos hijos de Dios. Ahora, ¿quiénes somos hijos de Dios? No todos son hijos de Dios. Para ser hijo de Dios hay unas características especiales. Se tiene que aceptar al Señor como su rey salvador, se tiene que bautizar en el nombre de Jesús y tiene que actuar conforme a la palabra lo enseña. [00:03:45]

Para reconocer a un cristiano verdadero y muy responsable, tenemos que mirar que se tiene que parecer al Dios Altísimo. Que nuestro porte, que el porte nuestro, tiene que ser igual al de Cristo. Para ello, número uno, el que quiera ser un verdadero cristiano responsable debe conocer al único Dios verdadero. [00:05:10]

Saber de Dios es diferente a conocerlo. Es muy diferente, muy diferente. Nosotros podemos saber de Dios, pero conocerlo tiene que haber experiencias, tienen que vivir situaciones que nos hagan entender lo grande que es nuestro Dios. Para conocerle a Dios y familiarizarnos con Él, hay que escudriñar la palabra. [00:06:59]

La verdad es que ser evangélico, ser cristiano sin problemas es fácil. Pero cuántos se han ido de la iglesia cuando se han enfrentado a problemas. Cuántos se han enojado y puesto en dificultad a muchos porque a alguien les llama la atención o porque les dicen lo que no quieren escuchar. [00:08:43]

Un cristiano responsable se conoce cuando guarda la palabra de Dios. El cristiano verdadero guarda y obedece la palabra del Señor. Dice la Biblia, pero sed hacedores de la palabra. Nosotros no solamente debemos saber versículos. Hay personas que saben versículos, oiga, y eso es una máquina de recitar versículos. [00:11:10]

Mostramos realmente el amor que tenemos para con Dios. Dios, pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos y sus mandamientos no son gravosos, no son complicados. Déjeme decirle que cuando nosotros conocemos a Dios y guardamos su palabra, la vida cristiana, hermano, se pone fácil. [00:12:46]

Un verdadero cristiano responsable no se burla de la palabra, no la desprecia y no la pone en segundo plano. Cuando yo hablo de que no se burla, hermano, es que cuando escucha el mensaje lo toma para sí y lo aplica a su vida. Cuando le digo no la desprecia es que dice si ese mensaje es para mí. [00:14:19]

Un verdadero cristiano responsable glorifica a Dios, pero no solamente cuando todo va bien. En todo momento glorificar es honrar, respetar y enaltecer. El cristiano debe glorificar a Dios en todo momento. Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. [00:15:46]

El cristiano debe guardarse del pecado y debe andar en santidad. Debemos seguir la santidad, debemos seguir lo puro, debemos seguir lo bueno. Debemos guardarnos para el Señor, debemos alejar el pecado de nuestra vida. Practicar la santidad. Cuando usted y yo somos hijos de Dios responsables, nos guardamos del mal. [00:22:41]

Un verdadero hijo de Dios responsable es unido con su hermano. O sea que eso indica que no debe haber enemistad entre nosotros. Si hay enemistad entre nosotros, yo puedo decir que hayan diferencias, porque no todos pensamos lo mismo. No todos actuamos de la misma manera. Diferencias pueden haber, pero enemistades entre creyentes no deberían existir. [00:23:26]

El cristiano debe amar a su hermano. Mire lo que dice la Biblia. Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida. En que amamos a los hermanos. O sea que si usted no ama a su hermano, usted todavía está muerto. Eso lo dice la Biblia. El que no ama a su hermano permanece en muerte. [00:24:23]

A pesar de todas las dificultades, a pesar de las diferencias que tengamos, hermano, tenemos algo en común y es más importante. Tenemos la fe en Cristo, tenemos un mismo Padre, tenemos un mismo Señor por el cual nosotros vivimos. No puede haber una contrariedad entre hermanos, enemistad no puede haber. [00:26:31]

El amor se demuestra, hermano, en la unidad. Se demuestra una pareja, unos esposos demuestran que se aman cuando son uno en ellos, los dos son uno. Pero cuando hay división, cuando cada quien coge por su lado, cuando no se puede ni voltear a mirar, cuando la sopa está fría y por fría está, pone problemas. [00:27:17]

Un verdadero hijo de Dios responsable se conoce por su amor, por el cariño que demuestra, por su buena voluntad, por su disposición, el trabajo en la obra del Señor, por su forma de ser especial, por ser una persona amorosa. No confianzuda, sino amorosa, que tiene amor por las almas, que tiene amor por el necesitado. [00:28:38]

El amor es una característica que debía resaltar nuestra personalidad. Hermano, lo que pasa es que usted no conoce mi vida. Cuando yo era niño, fui maltratado. Tuve unos padres difíciles. No me decían te quiero, ni siquiera me abrazaban. Pero conociste un Dios que es bueno, pero conociste un Dios que te ama. [00:29:40]

Un verdadero hijo de Dios responsable no le da temor decir cometí un error, me equivoqué y venir a los pies de Cristo y decir Señor necesito que me ayudes porque no puedo volver a cometer los mismos errores porque me van a destruir. Un verdadero hijo de Dios solamente piensa que necesita crecer. [00:31:26]

Y le diga Señor yo quiero ser un verdadero hijo de Dios de verdad. Ya no seamos, no sigamos mintiendo a nosotros mismos. La palabra es muy clara. Si nos mentimos a nosotros mismos, no tenemos heredad en el reino de los cielos y esta carrera que caminamos estamos perdiendo una guerra impresionante. [00:32:12]

¿Por qué no le dice al Señor yo quiero conocerte más? Yo quiero amarte más. Que no importa la situación de la cual estamos viviendo. Yo quiero ser un verdadero hijo de Dios que responda, que responda. Dígale Señor ayuda mi vida. Señor ora con poder en mi vida. Dios transforma mi corazón. [00:33:37]

Dígale a Él, Señor, transforma mi vida. Ayúdame, Señor. Dígale a Él. Oremos al Señor. Aquí veo no solamente hermanos, sino algunos amigos que han venido a este altar. [00:34:18]