En nuestra cultura actual, el conflicto y el litigio se han vuelto comunes, tanto en el ámbito legal como en el personal. En Estados Unidos, millones de demandas se presentan cada año, y el conflicto en el lugar de trabajo es una experiencia común para muchos. Sin embargo, como cristianos, estamos llamados a manejar nuestros conflictos de manera diferente, reflejando la unidad y pureza a la que nos llama Cristo. En 1 Corintios 6, Pablo aborda este tema, instando a los creyentes a resolver sus disputas internamente, en lugar de llevarlas ante los tribunales seculares. La iglesia de Corinto enfrentaba divisiones y conflictos que se llevaban a las cortes, lo que dañaba el testimonio de Cristo.
Pablo nos recuerda que, como seguidores de Cristo, debemos buscar resolver nuestros problemas con discernimiento espiritual, evitando el litigio público que puede dañar el testimonio de la iglesia. Nos desafía a considerar si nuestros valores espirituales están alineados con los principios bíblicos y a priorizar la gloria de Dios sobre la gloria personal. Además, Pablo nos recuerda que estamos equipados para resolver conflictos, ya que el Espíritu de Dios nos da sabiduría y discernimiento. En lugar de buscar soluciones externas, debemos encontrar dentro de la iglesia personas guiadas por el Espíritu que nos ayuden a resolver los problemas.
Pablo también nos desafía a considerar si es mejor soportar la injusticia que dañar el testimonio de la iglesia. La unidad y el amor dentro de la iglesia son más importantes que ganar una victoria personal. Nos advierte sobre los peligros del pecado persistente y nos recuerda que, en Cristo, hemos sido lavados, santificados y justificados. Esta transformación nos llama a vivir de manera diferente, reflejando el carácter de Dios en nuestras acciones.
Key Takeaways
- 1. Resolver conflictos internamente: Como cristianos, debemos evitar llevar nuestras disputas a los tribunales seculares, ya que esto puede dañar el testimonio de Cristo. En lugar de buscar justicia en el mundo, debemos resolver nuestros problemas con discernimiento espiritual y dentro de la comunidad de fe. [04:46]
- 2. Priorizar la gloria de Dios: Nuestros valores espirituales deben estar alineados con los principios bíblicos, priorizando la gloria de Dios sobre la gloria personal. Cuando nuestros valores están en el lugar correcto, podemos resolver conflictos de manera que honren a Dios. [14:52]
- 3. Equipados para resolver conflictos: Estamos equipados con el Espíritu de Dios para resolver cualquier conflicto. En lugar de buscar soluciones externas, debemos encontrar dentro de la iglesia personas guiadas por el Espíritu que nos ayuden a resolver los problemas. [21:34]
- 4. Soportar la injusticia por el bien del testimonio: A veces, es mejor soportar la injusticia que dañar el testimonio de la iglesia. La unidad y el amor dentro de la iglesia son más importantes que ganar una victoria personal. [26:37]
- 5. Transformación en Cristo: En Cristo, hemos sido lavados, santificados y justificados. Esta transformación nos llama a vivir de manera diferente, reflejando el carácter de Dios en nuestras acciones y evitando el pecado persistente. [35:53]
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Youtube Chapters
- [00:00] - Welcome
- [04:46] - Evitar litigios públicos
- [09:31] - La carnalidad en Corinto
- [11:49] - La autoridad de Dios
- [14:52] - Valores espirituales correctos
- [16:33] - Resolución de conflictos bíblicos
- [20:12] - Sabiduría y humildad
- [21:34] - Equipados para resolver conflictos
- [23:09] - Consejería espiritual
- [23:57] - Mejor perder que dañar el testimonio
- [24:57] - Evitar discusiones vanas
- [26:37] - Unidad en el Espíritu
- [28:43] - Peligros del pecado persistente
- [31:05] - Honestidad en los tratos
- [33:29] - Autoexamen espiritual
- [35:53] - Lavados, santificados y justificados