Living with Purpose Aligned to God's Kingdom

Devotional

Sermon Summary

Sermon Clips

Imagínate que tú pasas un mes, dos meses, entrenando para una carrera, sudando todos los días, comiendo bien, ejercitándonos todos los días. Y llegamos a la carrera y comenzamos a correr esta carrera. Y terminamos, pero terminamos en la meta equivocada. Imagínate cómo te sentirías saber que tú terminaste la carrera, pero terminaste la carrera equivocada. La meta equivocada. Esta analogía es lo mismo que sucede en nosotros cuando nosotros no caminamos en el propósito del reino. Podemos correr una carrera, pero quizás posiblemente caigamos en el error de correr la carrera equivocada. [00:55:31]

Nuestra vida tiene que dejar una marca del reino en todo lo que nosotros tocamos. Amén. Y esta es la responsabilidad de todo el creyente. En otras palabras, es tu responsabilidad. No es la responsabilidad de Pastor Javier, Pastor Melinda, Pastor Nacho. No es la responsabilidad solamente de los elegidos, algunos elegidos. Es la responsabilidad de todo el pueblo de Cristo. [00:56:55]

Tres de las preguntas más comunes en cualquier cristiano es cómo escucho la voz de Dios, cuál es mi propósito y cuál es la voluntad de Dios. A veces nos cuesta esas tres preguntas. Pero cuando, vamos a estudiar ahora, que cuando tomamos y nos alineamos correctamente, es muy fácil identificar el propósito que el Señor tiene para tu vida. [00:57:30]

Hay una tensión entre los planes que el Señor tiene para nosotros y nuestros planes. Una tensión constante que nosotros experimentamos porque a veces queremos hacer nuestros propios planes, incluso de pequeños como papás, líderes de jóvenes. Nosotros animamos a la gente a que sueñe grande, tienes que soñar grande. Persigue tu meta, sigue lo que hay en tu corazón, estudia, tiene un buen trabajo. Y cada uno de esos deseos o anhelos en nuestro corazón no son malos, son buenos. [01:00:36]

Pero lo que sucede es cuando ponemos sobre el nombre de Jesús nuestros deseos y nuestros planes, hemos creado un ídolo por encima del nombre de Jesús. Ese ídolo, tu trabajo, tu esposa, tus hijos, tus talentos. Cuando nos enfocamos todo nuestro deseo y toda nuestra forma a ese ídolo, hemos puesto algo por encima de Jesucristo que no tiene que estar ahí. Ese es tener un propósito carnal. Cuando nuestra motivación es simplemente generar algo terrenal. [01:03:51]

El propósito del reino en el otro lado es alinear nuestra vida con la asignación divina que Dios tiene. Y muchas veces el propósito del Señor en ocasiones está en contra de lo que nosotros queremos hacer. A veces, momentáneamente, está en contra de lo que nosotros queremos hacer porque el Señor está interesado en nuestro corazón, en nuestro espíritu, para que todo lo que brote de fuera de nosotros sea a la imagen y semejanza de Jesucristo, no a la imagen y semejanza de Karen Zamora. [01:04:31]

El reino, el propósito del reino se distinguen estas dos cosas, el reino es eterno, cuando tenemos propósito en el reino es centrado en Cristo, sirve a otros, requiere rendición diariamente y requiere que caminemos en fe. ¿Qué sucede? Cuando caminamos en el propósito del reino es temporal, ahora me siento con propósito porque tengo un buen trabajo, pero una vez se me quita el trabajo no sé quién soy. Pasó una crisis porque mi identidad fue completamente borrada porque perdí mi trabajo. [01:06:08]

Cuando estamos construyendo algo a nuestras propias fuerzas, si lo construiste con tus propias fuerzas, te va a tocar mantenerlo vivo con tus propias fuerzas. ¿Qué significa? Ahora tengo que controlar todo a mi alrededor para no perder el trabajo. Tengo que controlar todo a mi alrededor para seguir con una buena familia. Tengo que controlar todo alrededor para que mis hijos sigan viviendo en la iglesia, aunque no quieran. Tengo que controlar mi enojo. Tengo que controlar todo porque lo he construido solo. Y ese no es el llamado para ninguno de nosotros. [01:07:51]

Jesucristo dijo, vengo y les dejo un ayudador, que es el Espíritu Santo, para que podamos establecer el reino de los cielos con la ayuda del Señor. Y aquello que fue imposible para nosotros, pueda ser posible con el Espíritu Santo. [01:08:25]

El mundo dice, persigue tus sueños. Hazte influencer. Tienes una voz. Tienes un mensaje. Ese es el mundo. Y lo perseguimos. Y llega un momento, usualmente cuando ya pasas los 25 años, que llegas, wow, perdí tiempo. Jóvenes, si están aquí, no pierdan tiempo. [01:11:11]

El reino de Cristo, el propósito del reino de Cristo, es como la ilustración que voy a hacer en este momento. Es totalmente lo opuesto a lo que el mundo nos dice que hagamos. El reino de Cristo dice, yo soy la fundación en la que construyes todo. El versículo, Mateo 6, 33, que leímos, dice que hermanos, dice, más bien busca primero el reino de... Y su justicia y todas estas cosas serán... ¿Cuál es lo primero que buscamos? El reino de Dios. [01:11:38]

No significa, ya no voy a tener sueños y metas. No, hermanos. Significa que mis sueños y mis metas ahora están delante del Señor. Y digo, Señor, ¿puedo tocar esto? Todavía no, pero tranquilo. Te lo doy más adelante. Sigue buscándome. Amén. Sigue buscándole. Todos nosotros podemos ser y podemos cambiar en cualquier momento de nuestra vida el rumbo que nosotros tenemos. [01:14:14]

Porque Jesús es supernatural. Él cambia el tiempo. Él hace redención de lo que nosotros tomamos, las malas decisiones que tomamos, del tiempo que perdimos. Y Él redime todo el tiempo, todas las malas decisiones para alinearnos al propósito que Él tenía desde el principio de la tierra. ¡Wow! Ese es el Dios que nosotros servimos. [01:14:45]

Cuando construimos de esta forma, hermanos, podemos tener fe. Que aún cuando los planes que nosotros tengamos no vayan como nosotros queremos en ese momento, nuestra confianza no está en el plan, está en Jesucristo. [01:15:15]

Nuestra identidad tiene que estar en Jesucristo. ¿Por qué las crisis de los 40? Nos pasa, construimos, construimos, construimos, hemos construido mucho. Y conocemos personas, pierden su trabajo, su esposa muere, sus hijos fallecen. Y son momentos dolorosos de la vida, hermanos. A todos nos mueven, a cada uno de nosotros nos mueve. ¿Cuál es la diferencia de aquel que cree en Jesucristo que dice, aún cuando el dolor que sienta no lo puede explicar? Mi confianza está en mi Padre, el que me restauró, el que me ha hecho nuevo, el que me ha establecido en el reino de Cristo. [01:15:42]

Lo que sucede es que a veces queremos los beneficios sin relación con el rey de reyes. Y eso no nos va a funcionar en este momento. El Señor quiere venir a decir, ¿cómo está tu relación con el Señor? ¿Qué tan íntimos somos con el Señor? ¿Qué tanto le conocemos? ¿Le preguntaste antes que tomaras el trabajo que tomaste si ese era tu trabajo? ¿Le preguntaste al Señor si tenías que invertir en ese negocio? ¿Le has preguntado al Señor cómo ser mejor papá? ¿Le has preguntado al Señor cómo ser mejor esposa? ¿Le has preguntado al Señor cómo ser mejor hijo? ¿O haces lo que a ti se te dé? Alineados al propósito del Señor. [01:16:42]

Cuando nos alineamos, hermanos, nuestros frutos, como Pastor Nacho y Pastor Javier decían en la mañana, nuestros frutos revelan al que nos creó. Y yo, mientras durante la alabanza, yo sentí que el Señor me dijo, vengo a este lugar a reconocer talentos, a reconocer llamados que están dentro de este lugar. A entregar llaves del reino de Cristo a las personas que desean hacer el trabajo de Cristo. No para glorificarse a sí mismos, sino que para traer unidad y bendición al cuerpo de Cristo. [01:17:36]

El propósito del reino de Dios es más grande que el propósito individual de cada uno de ustedes. Cuando nos unimos juntos al mismo propósito del reino de Dios, que es salvar a las personas, alimentar a aquellos que necesitan, llevar la palabra de Cristo al alma de ellos y a la vida de ellos, que el Señor les transforme, que podamos ser ejemplos de Dios en todas las áreas que nosotros caminemos. Cuando comenzamos a caminar en el propósito del reino y nos comenzamos a unir en la casa del Señor, somos más fuertes y podemos alcanzar aún más territorio que hacer cosas individualmente. [01:21:41]

Porque no necesitamos, hermanos, el legado que nosotros tenemos es más grande que el nombre que tú tienes. Y todos necesitamos posicionarnos para recibir la llave que el reino de cielo tiene para ti. Porque donde tú vas, yo quizás no pueda ir. Pero puedo apoyarte a que llegues. [01:22:43]

Nuestro legado del reino. Es más grande que nuestro legado individual. Y juntos podemos alcanzar aún más territorio que individualmente. Lo que el enemigo desea es dejarnos en un lugar donde solo pensemos en lo que yo necesito, lo que yo quiero. Aislados del cuerpo de Cristo. Ese no es el reino. Cada uno de ustedes, tú, tienes un propósito, un talento, un llamado único. Tiene tu nombre y tu apellido. [01:24:50]

Tú tienes un llamado. No para el reino del mundo, para el reino de Cristo. Y ese llamado al reino de Cristo no nos da más carros a veces. No nos da más casas a veces. Quizás sí en su momento, pero al principio el Señor quiere dejar una generación o un tesoro de personas que le conocen a Cristo. Que se ven como Cristo. Que caminan como Cristo. Que están en unidad como Cristo. Que imparten el conocimiento que tienen gratis como Cristo. Que aman como Cristo. Que establecen el reino de los cielos en su trabajo como Cristo. Que caminan en su familia como Cristo. Que son hermanas que aman como Cristo. [01:27:55]

Mi deseo es que mi persona muera y Él levante. Y así podemos alcanzar más. Juntos. Como hermanos y hermanas. Necesitamos, hermanos. Necesitamos a Cristo. [01:28:55]

Ask a question about this sermon