La Transformación del Creyente por el Espíritu Santo

Devotional

Sermon Summary

Sermon Clips

Gracias, Eduardo. Un placer estar de nuevo aquí. Y como te decía, fuera de cámara, mucha gente te mandó saludos. Recientemente estuve en Monterrey y personas que ven el programa me pidieron expresamente que te saludara. Así que si alguno de ellos está viendo el programa, por lo menos que sepa que de verdad que te di sus saludos. [00:00:48]

Bueno, quizás debemos enfocar esto desde dos puntos de vista diferentes. En primer lugar, entender que todo verdadero creyente tiene al Espíritu Santo. Y en segundo lugar, que muchos de estos dones milagrosos o de actos milagrosos que se ven en las iglesias no son una evidencia ni de salvación, ni de que Dios está usando a la persona que está haciendo estos milagros, ni del bautismo del Espíritu Santo. [00:01:43]

Lo que evidencia la salvación de una persona es el hecho de que Dios ha transformado su vida, de que ahora esa persona ama la palabra de Dios, desea hacer la voluntad de Dios, está en un proceso de santificación gradual a través del cual se va apareciendo cada vez más al Señor Jesucristo. Eso es una evidencia de salvación, porque eso, Eduardo, el diablo no puede manipularlo, el diablo no puede, estoy buscando una palabra, falsificarlo. [00:03:03]

Cuando él transforma una vida donde una persona que vivía para su propia gloria, que vivía para hacer su voluntad, ahora vive para la gloria de Dios y para hacer la voluntad de Dios, y se está haciendo cada vez más semejante al Señor Jesucristo, esa es una obra y una evidencia de la presencia del Espíritu de Dios en esa persona. [00:04:34]

Eso nunca sucedió porque Fletcher murió primero que Wesley, que tuvo una vida bastante larga, pero el punto es que Fletcher fue de las primeras personas que enseñaron que había una diferencia entre ser salvo y ser santificado luego de haber recibido el bautismo del Espíritu Santo. Y a través de Fletcher esa enseñanza pasó a otros grupos hasta popularizarse en el pentecostalismo moderno de una manera global en el mundo. [00:06:05]

Mira, por ejemplo, te voy a citar varios textos rápidamente. En Juan, capítulo 7, dice que el Señor en el último y gran día de la fiesta se puso en pie y alzó la voz diciendo, si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de lo más profundo de su ser brotarán ríos de agua viva. Y ahora escucha, él decía esto del Espíritu Santo que los que habían creído en él habían de recibir. [00:06:44]

Hablando de la iglesia y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, aunque son muchos, constituyen un solo cuerpo. Así también es Cristo, pues por un mismo espíritu todos fuimos bautizados en un solo cuerpo, ya sea judío o griego, esclavos o libres. A todos se nos dio a beber del mismo espíritu. Eduardo, es imposible ser un verdadero creyente y no haber sido bautizado en el Espíritu Santo. [00:07:38]

Es imposible que una persona sea un verdadero creyente y no haya tenido ese bautismo o no tenga el Espíritu Santo morando en él. Otro texto, Eduardo, ya te dejo la palabra para que continuemos avanzando en el programa, pero dice Pablo que, sin embargo, vosotros no estáis en la carne, sino en el espíritu, dice Romanos 8, 9, si en verdad el espíritu de Dios habita en vosotros, pero si alguno no tiene el espíritu de Cristo, el tal no es de él. [00:09:10]

En el siglo I no tenemos ninguna duda de que el don de lenguas estaba vigente, sea cual sea la posición que tengamos con respecto a ese don extraordinario en el día de hoy. Pablo dice en ese texto que todos fuimos bautizados en el Espíritu Santo. Ya lo acabo de leer. Sin embargo, más adelante, Pablo dice en el versículo 28 de ese mismo capítulo y en la iglesia Dios ha designado primeramente apóstoles, en segundo lugar profetas, en tercer lugar maestros, luego milagros, después dones de sanidad, ayudas, administraciones diversas, administraciones diversas clases de lenguas. [00:11:03]

En el siglo I en este mismo capítulo vemos claramente que todos los creyentes han sido bautizados en el Espíritu Santo, pero que no todos los creyentes tienen esos dones milagrosos. Así que aún en el siglo I en que esos dones estaban vigentes, los dones milagrosos o extraordinarios no eran una evidencia del bautismo en el Espíritu Santo. [00:12:13]

Indudablemente también hay engañadores que están usando estas cosas para lucrar. Y esto no es extraño porque lo vemos en el Nuevo Testamento que iban a venir hombres que iban a tergiversar las enseñanzas de las Escrituras para su propio provecho. Segunda de Pedro, capítulo 2, versículos 1 al 2, dice claramente que así como hubo falsos profetas en el Antiguo Testamento, habrían falsos maestros en el Nuevo Pacto, en el Nuevo Testamento, y que lo iban a hacer muchos de ellos para obtener ganancias deshonestas. [00:13:44]

Lo que quizás más me interesa resaltar, Eduardo, es el impacto que esto produce en verdaderos creyentes que no ven en sus vidas estos dones milagrosos, a pesar de que el Espíritu Santo sí está obrando en ellos para llevarlos a ser cada vez más como Jesús. Entonces, eso causa mucha perplejidad y aún puede causar mucha angustia. [00:15:17]

Yo leí un libro, no voy a citar el autor ni el libro, pero yo leí un libro que tenía esta enseñanza, un libro que se hizo sumamente popular en América Latina. Yo recuerdo que me lo leí de un tirón en un solo día y cuando yo leí lo que esa persona hablaba y decía de esas experiencias súper extraordinarias, Eduardo, yo siendo un nuevo creyente, comencé a pedirle con angustia al Señor, por favor, si el don de lenguas está vigente, si todas estas cosas que este autor dice es así. [00:15:32]

Yo no quiero ser un creyente a medias. Sin embargo, estuve orando, yo no sé hasta qué hora de la madrugada y nada sucedió. Ahora, Eduardo, yo no tengo la menor duda de que a partir de mi conversión hasta el día de hoy, el Señor está dobrando en mi vida por su pura gracia sin ver esas cosas súper extraordinarias, sino más bien viendo la obra del Espíritu de Dios en nuestras vidas, no solamente transformándonos a la imagen de Cristo, sino también usándonos en la enseñanza de su palabra. [00:16:38]

Nosotros no negamos la realidad de que Dios en esta época, como en todas las épocas, Dios sigue obrando con poder en la vida de muchas personas como él lo quiere y cuando lo quiere para sanar, para hacer cosas extraordinarias. Nuestro Dios es todopoderoso, Eduardo. Nosotros no negamos la realidad de los milagros. Ahora, lo que nosotros no vemos en el Nuevo Testamento, aun cuando los apóstoles estaban vivos y tenían todos estos dones, nosotros no vemos que ellos llevaban a cabo campañas de sanidad. [00:18:21]

Una cosa es afirmar la realidad de que Dios hace milagros y otra muy diferente, afirmar que esos dones de sanidad, de lenguas, estén vigentes en el día de hoy. Por lo que vemos en la historia de la iglesia, ya para siglo II, siglo III, esos dones no eran evidentes como si lo eran durante el primer siglo porque ya el canon del Nuevo Testamento estaba cerrado. Ya Dios habló en su palabra todo lo que él iba a hablar. [00:19:55]

Mira, por ejemplo, lo que dice en Hebreos capítulo 2. Primero nos dice en el capítulo 1 que ya Dios habló todo lo que iba a hablar por medio de su hijo y obviamente por medio de aquellos que representaban a su hijo, que son los apóstoles que fueron testigos de su resurrección. Pero luego Pablo dice, o el autor de Hebreos, porque si la palabra hablada por medio de ángeles resultó ser inmutable y toda transgresión y desobediencia recibió una justa retribución, ¿Cómo escaparemos nosotros y descuidamos una salvación tan grande? [00:20:08]

El primer siglo, cuando Juan escribió el Apocalipsis, terminó el canon del Nuevo Testamento, ya no tenemos nuevas revelaciones, ya no necesitamos más confirmación que la palabra misma y el poder de esta palabra cuando es predicada. Así que reitero, Eduardo, nosotros creemos en milagros, nosotros creemos en que Dios hace obras portentosas sanando personas de cualquier tipo de enfermedad, pero él hace eso como quiere, cuando lo quiere y no a través de milagreros, sino a través de la oración de su pueblo. [00:21:27]

Dios obra por medios ordinarios a través de personas comunes y corrientes que predican su palabra y él salva pecadores, trae personas de la muerte a la vida, santifica por medio de su palabra. Y eso es una obra portentosa de Dios que él hace a través de medios ordinarios, Eduardo, no a través de cosas extraordinarias. Cuando las iglesias se acostumbran a estar buscando solamente estas cosas súper emocionantes, entonces dejan de hacer lo que Dios nos ha llamado a hacer. [00:22:48]

¿Qué es esa otra crueldad que a veces se comete, yo diría, algunos sin intención, pero que se comete cuando tú le dices a una persona que está enferma, bueno, es que tú no eres sanado porque tú no tienes fe? No, Eduardo, a veces las personas no son sanadas por la simple razón de que Dios no quiere sanarlos, porque Dios determinó no sanarlos. [00:24:10]

Yo no quiero que esto suene cruel, pero lo cierto es, Eduardo, que todos algún día seremos sanados, pero no como lo esperamos. Algunos van a ser sanados aquí, otros van a ser sanados cuando partan a la presencia del Señor y ya en la resurrección tendremos un cuerpo glorificado que no padecerá de enfermedad ni de muerte. [00:24:30]

Que nosotros no debemos nunca bajo ningún concepto juzgar la Biblia a la luz de la experiencia que yo he tenido, sino que yo debo juzgar mi experiencia a la luz de lo que dice la Biblia, porque lo que dice la Biblia está por encima de mi experiencia. [00:25:33]

Estoy tan metido con el tema del apóstol Pablo, pero Eduardo, en segunda de Pedro, capítulo 1, tú sabes que Pedro fue testigo presencial de la transfiguración, qué experiencia más extraordinaria, junto con Jacobo y con Juan. Y luego de decir en el capítulo 1, versículo 16 al 18, esa experiencia tan extraordinaria que ellos tuvieron, Pedro dice en el versículo 19, y así tenemos la palabra profética más segura a la cual hacéis bien en prestar atención como a una lámpara que brille en el lugar oscuro hasta que el día despunte y el lucero de la mañana aparezca en vuestros corazones. [00:26:02]

Ask a question about this sermon