La Cena del Señor: Unidad, Reverencia y Proclamación

Devotional

Day 1: La Cena del Señor como acto de reverencia y proclamación

La Cena del Señor es un acto sagrado que va más allá de un simple banquete. Es un momento de memoria y proclamación del Evangelio, recordando el sacrificio de Cristo y su resurrección. En la iglesia de Corinto, este acto se había convertido en un evento desordenado y egoísta, lo que llevó a Pablo a recordarles la importancia de participar con reverencia y unidad. La Cena del Señor nos llama a vivir en amor y unidad como un solo cuerpo en Cristo, proclamando su muerte y resurrección mientras esperamos su regreso glorioso. [20:03]

1 Corintios 10:16-17 (ESV): "La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la comunión de la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la comunión del cuerpo de Cristo? Porque hay un solo pan, nosotros, con ser muchos, somos un solo cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan."

Reflexión: ¿Cómo puedes participar en la Cena del Señor con un corazón más reverente y consciente de su significado esta semana?

Day 2: Examinarnos antes de participar

Antes de acercarnos a la mesa del Señor, es esencial que nos examinemos a nosotros mismos con honestidad y humildad. Participar indignamente puede traer juicio y disciplina de parte de Dios, pero su corrección es amorosa y busca guiarnos de vuelta al camino correcto. Este examen personal nos ayuda a acercarnos a la Cena del Señor con un corazón humilde y arrepentido, recordando la gracia y el amor de Dios por nosotros. [34:51]

2 Corintios 13:5 (ESV): "Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?"

Reflexión: ¿Qué áreas de tu vida necesitan ser examinadas y entregadas a Dios antes de participar en la Cena del Señor?

Day 3: Unidad en el cuerpo de Cristo

La Cena del Señor nos recuerda que somos un solo cuerpo y que debemos amarnos y cuidarnos mutuamente. En la iglesia no hay lugar para divisiones ni egoísmo, ya que todos somos iguales ante Dios y necesitamos de su gracia. Este acto de unidad nos llama a vivir en amor y a reflejar el amor de Cristo al mundo, mostrando consideración y respeto mutuo. [39:55]

Efesios 4:3-4 (ESV): "Solicitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz; un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación."

Reflexión: ¿Cómo puedes fomentar la unidad y el amor en tu comunidad de fe esta semana?

Day 4: Proclamación del Evangelio

Al participar en la Cena del Señor, proclamamos la muerte y resurrección de Cristo y esperamos su regreso glorioso. Este acto de obediencia está lleno de significado y nos llama a vivir en amor y unidad, reflejando el amor de Cristo al mundo. La proclamación del Evangelio a través de la Cena del Señor es un recordatorio constante de nuestra misión como creyentes. [30:51]

1 Pedro 2:9 (ESV): "Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable."

Reflexión: ¿De qué manera puedes proclamar el Evangelio en tu vida diaria, reflejando el amor de Cristo a quienes te rodean?

Day 5: La disciplina de Dios como corrección amorosa

La disciplina de Dios no es una condena eterna, sino una corrección amorosa para guiarnos de vuelta al camino correcto. Nos llama a acercarnos a la mesa del Señor con un espíritu humilde y arrepentido, recordando su gracia y amor por nosotros. Esta corrección divina es una oportunidad para crecer en nuestra fe y caminar más cerca de Dios. [37:37]

Hebreos 12:10-11 (ESV): "Y aquellos, ciertamente por pocos días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero este, para lo que nos es provechoso, para que participemos de su santidad. Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados."

Reflexión: ¿Cómo puedes ver la disciplina de Dios como una oportunidad para crecer y acercarte más a Él en tu vida diaria?

Sermon Summary

En el mensaje de hoy, nos adentramos en 1 Corintios 11:17-34, donde Pablo aborda la importancia de la Cena del Señor y cómo debe ser un acto de reverencia y unidad. En la iglesia de Corinto, la Cena del Señor se había convertido en un evento desordenado y egoísta, donde algunos se embriagaban y otros pasaban hambre. Pablo confronta esta conducta, recordando a los corintios que la Cena del Señor no es un banquete común, sino un acto sagrado de memoria y proclamación del Evangelio. La Cena del Señor es un recordatorio de que Cristo murió por nuestros pecados y resucitó, y que debemos vivir en unidad y amor como un solo cuerpo en Cristo.

Pablo enfatiza que la Cena del Señor es un momento para examinarse a uno mismo, para asegurarse de que nos acercamos a la mesa con un corazón humilde y arrepentido. No es un acto para ser tomado a la ligera, ya que participar indignamente puede traer juicio y disciplina de parte de Dios. La disciplina de Dios no es una condena eterna, sino una corrección amorosa para guiarnos de vuelta al camino correcto.

Además, Pablo nos llama a considerar cómo tratamos a nuestros hermanos en la fe, recordándonos que somos un solo cuerpo y que debemos amarnos y cuidarnos mutuamente. La Cena del Señor es un acto de unidad, donde todos somos iguales ante Dios y necesitamos de su gracia. Al participar, proclamamos la muerte y resurrección de Cristo, y esperamos su regreso glorioso.

En conclusión, la Cena del Señor es un acto de memoria, proclamación y unidad. Nos recuerda el sacrificio de Cristo y nos llama a vivir en amor y unidad como su cuerpo. Al participar, recordamos que fuimos comprados con su sangre y que somos llamados a vivir en obediencia y amor, esperando su regreso.

Key Takeaways

1. La Cena del Señor como acto sagrado: La Cena del Señor no es un banquete común, sino un acto de memoria y proclamación del Evangelio. Nos recuerda el sacrificio de Cristo y su resurrección, y nos llama a vivir en unidad y amor como un solo cuerpo en Cristo. [20:03]
2. Examinarnos antes de participar: Antes de acercarnos a la mesa del Señor, debemos examinarnos a nosotros mismos con honestidad y humildad. Participar indignamente puede traer juicio y disciplina de parte de Dios, pero su corrección es amorosa y busca guiarnos de vuelta al camino correcto. [34:51]
3. Unidad en el cuerpo de Cristo: La Cena del Señor nos recuerda que somos un solo cuerpo y que debemos amarnos y cuidarnos mutuamente. No hay lugar para divisiones ni egoísmo en la iglesia, ya que todos somos iguales ante Dios y necesitamos de su gracia. [39:55]
4. Proclamación del Evangelio: Al participar en la Cena del Señor, proclamamos la muerte y resurrección de Cristo y esperamos su regreso glorioso. Es un acto de obediencia lleno de significado, que nos llama a vivir en amor y unidad, reflejando el amor de Cristo al mundo. [30:51]
5. La disciplina de Dios como corrección amorosa: La disciplina de Dios no es una condena eterna, sino una corrección amorosa para guiarnos de vuelta al camino correcto. Nos llama a acercarnos a la mesa del Señor con un espíritu humilde y arrepentido, recordando su gracia y amor por nosotros. [37:37]
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Youtube Chapters

[00:00] - Welcome
[04:07] - Introducción a 1 Corintios 11
[06:51] - Divisiones en la Iglesia de Corinto
[10:52] - Problemas de Conducta en la Cena
[17:58] - La Cena del Señor y la Unidad
[20:03] - Propósito de la Cena del Señor
[23:58] - Significado de la Pascua
[26:49] - Nuevo Pacto en la Sangre de Cristo
[30:51] - Proclamación del Evangelio
[34:51] - Examinarnos Antes de Participar
[37:37] - Disciplina y Corrección de Dios
[39:55] - Consideración y Respeto Mutuo
[42:50] - Oración Final y Preparación para la Cena

Sermon Clips

Entonces, hermanos, vamos a abrir su Biblia, si quieren, en Primera de Corintios, capítulo 11, versículo va a ser del 17 al 34, y hemos llamado el sermón un llamado a la reverencia y la unidad. Entonces, imagínense que ustedes llegan a un cumpleaños familiar o una fiesta familiar, donde hay pastel, comida, risas, todo el mundo está contento, pero de repente, algunos agarran los mejores platos y se sientan en una esquina a comérselo, mientras otros se quedan mirando así y no ven nada y se quedan con las tripitas sonando. [00:01:29] (40 seconds)

Nos sirve como un recordatorio de que el mensaje del Evangelio debe de gobernar nuestras vidas y debe de gobernar nuestra iglesia. ¿Se acuerdan? La semana pasada hablamos que las cosas que Dios establece en la Biblia y que tenemos que seguir, no podemos llevarnos por la cultura del mundo que influya. Y es importante eso del Evangelio. [00:03:47] (24 seconds)

Sin embargo, en la iglesia de Corintio, volviendo con nuestros hermanos en Corintio, estaban celebrando la cena del Señor de una manera totalmente incorrecta. Y Pablo, con firmeza, lo confronta. Y ahí dice que en la cena, eso se había hecho un desastre. Habían, no había unión entre los hermanos. Algunos hermanos llegaban, había glotonería, habían borrachos, y tú dirás, borrachos, sí. [00:05:08] (30 seconds)

Y Pablo les advierte que por esa falta de respeto de estos hermanos, en la cena del Señor, ya el Señor estaba interviniendo, trayendo enfermedad, y hasta algunos hermanos habían muerto debido a eso. Entonces, la cena del Señor es algo bien serio. Y vamos a ver qué dice la Escritura al respecto. Vamos a leerlo por pedazos. Vamos a empezar a leer. [00:05:40] (25 seconds)

Y eso es muy importante, que aunque tengamos un pedacito de pan, tenemos que compartirlo para que haya una comunión real. Y aparte que no había una comunión real con los hermanos, no había una comunión real con Cristo tampoco, debido a todo ese pecado. Entonces la cena del Señor es para recordar a Cristo y para reflejar el amor y la unidad del cuerpo, porque somos un mismo cuerpo, ¿eh? [00:19:03] (26 seconds)

Y Pablo lo que le dice es, hey, la cena del Señor no es un banquete ni una cena común, sino es un acto de memoria y proclamación. Cuando recordamos el cuerpo entregado y la sangre derramada, proclamamos el Evangelio, proclamamos que Cristo se levantó de la muerte, y no solamente que murió y se levantó de la muerte, sino que Cristo viene por nosotros. [00:21:00] (22 seconds)

Entonces, versículo 26, ¿qué es lo que le dice? Volviendo a Corintio, Pablo le está diciendo, porque cuantas veces comáis este pan y bebáis la copa, proclamáis la muerte del Señor Jesucristo hasta que Él venga. Cada vez que participamos en la cena del Señor, no solo recordamos, sino que proclamamos, miramos hacia atrás, miramos hacia adentro de nosotros y miramos hacia el futuro, esperando que Cristo venga. [00:29:30] (26 seconds)

Y Pablo lo que le está acordando a los corintios, la cena del Señor no es un juego de muchachos. Eso no es un banquete que tú vas y te comes todo lo que tú quieras ahí. Ahí no hay glotonería. Participar indignamente del Señor, acercarse a la mesa del Señor irreverentemente, sin una autoevaluación. Y déjame dejar bien claro que la cena es para pecadores. [00:33:52] (25 seconds)

Nadie es digno de acercarse a la mesa del Señor. Nadie. Pero por la sangre de Cristo podemos llegar y somos justificados ante Dios. Ustedes tienen que entender que Dios nos mira a nosotros como tú te ves. Él te mira perfecto justo por la sangre de Cristo Jesús en la cruz. Eso se llama la gracia de Dios. [00:34:57] (20 seconds)

Entonces, si no nos examinamos con honestidad y humildad, es un peligro grave. Porque entonces, ¿qué sucede? La disciplina de Dios viene sobre nosotros. Y eso nos lleva al punto que sigue. El juicio y corrección de parte de Dios. Miren el versículo 30 y 32. Dice Pablo, Por eso hay entre ustedes muchos débiles y enfermos e incluso varios han muerto. [00:36:13] (28 seconds)

Y como dijo, eso no es una disciplina donde tú vas a perder una condena eterna. Es una corrección amorosa del Padre. Dice, no, pero el Señor a mí no me... Sí. Hebreo 12 .6 Porque el Señor disciplina al que ama. Entonces la idea aquí es... La idea aquí es... Que tenemos que venir a la mesa del Señor con un espíritu humilde de arrepentimiento. [00:37:47] (30 seconds)

Entonces, antes de tomar el pan y la copa, mira a tu hermano, mira a los ojos, mira a tu corazón. ¿Hay división en tu corazón? ¿Hay división? ¿Hay orgullo? La mesa nos llama a vivir como una familia, hermano. Compartiendo, cuidándonos, perdonándonos. Y ese es el punto principal. Tenemos que aprender a perdonar. [00:40:51] (26 seconds)

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