Vivimos en tiempos de incertidumbre, donde las noticias y la cultura constantemente intentan definirnos y sembrar temor en nuestros corazones. Muchos en nuestra comunidad, especialmente la comunidad latina, sienten miedo e inseguridad por lo que sucede en el mundo y en sus propias vidas. Sin embargo, nuestra esperanza no está en los gobiernos, ni en los títulos, ni en lo que otros dicen de nosotros. Nuestra verdadera identidad y seguridad provienen de Dios, quien nos llama a ser ciudadanos de su Reino y no de este mundo.
Al mirar la historia de Moisés en Éxodo 3 y 4, vemos cómo él luchó con su identidad y con las etiquetas que otros y él mismo se había puesto. Moisés tenía un pasado complicado, lleno de rechazo, errores y dudas. Cuando Dios lo llama, Moisés responde con excusas: “¿Quién soy yo para hacer esto? No sé hablar bien. No soy suficiente.” Pero Dios no responde a sus excusas con motivación humana, sino con una revelación: “Yo estaré contigo.” La presencia de Dios es la respuesta a nuestras inseguridades y a las mentiras que hemos creído sobre nosotros mismos.
Muchos de nosotros seguimos viviendo bajo las etiquetas del pasado, las palabras de rechazo, o las limitaciones que otros han puesto sobre nosotros. Pero Dios nos recuerda que Él es quien nos diseñó, quien nos conoce desde el vientre de nuestra madre, y quien nos da propósito. No somos definidos por nuestro pasado, por nuestras emociones, ni por lo que la cultura dice. Somos definidos por la voz de Dios, quien nos llama hijos, amados y escogidos.
Dios no busca personas perfectas ni que se sientan listas; busca corazones dispuestos. Él no nos deja igual, sino que nos transforma y nos da una nueva identidad en Cristo. Hoy es el día para dejar de esconderse detrás de excusas, dejar de repetir las mentiras del pasado, y levantarse en obediencia, confiando en que “Yo Soy” está con nosotros. Nuestra ayuda y valor vienen solo de Él. Al rendir nuestra vida y recibir nuestra identidad de Cristo, podemos caminar en la plenitud de su propósito y presencia.
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Key Takeaways
- 1. La esperanza no está en el gobierno ni en las circunstancias, sino en Dios. En medio de la incertidumbre y el temor que rodea a nuestra comunidad, es vital recordar que nuestra seguridad y esperanza no dependen de sistemas humanos, sino del Dios que nunca falla. Él es la fuente de nuestra fortaleza y el único que puede traer verdadera paz y dirección a nuestras vidas. [33:59]
- 2. Dios no responde a nuestras excusas con motivación, sino con su presencia. Moisés presentó muchas razones por las cuales no podía ser usado por Dios, pero la respuesta divina no fue una lista de cualidades humanas, sino la promesa: “Yo estaré contigo.” La presencia de Dios es suficiente para superar cualquier inseguridad o limitación personal. [48:39]
- 3. Nuestra identidad no está definida por el pasado, las etiquetas o las emociones. El mundo y nuestras propias experiencias intentan marcarnos por nuestros errores, fracasos o sentimientos, pero Dios nos recuerda que somos lo que Él dice que somos. Nuestra verdadera identidad se encuentra en quien nos creó y nos llama por nombre, no en lo que sentimos o en lo que otros opinan. [50:46]
- 4. Dios busca corazones dispuestos, no personas perfectas. No es necesario sentirse capaz o tener una historia impecable para ser usado por Dios. Él utiliza a quienes están dispuestos a rendirse y a confiar en su poder, porque la transformación y el propósito vienen de Él, no de nuestras habilidades o emociones. [69:04]
- 5. La presencia de Dios transforma y redefine nuestra vida. Cuando Dios dice “Yo Soy” y promete estar con nosotros, no solo nos da una nueva identidad, sino que nos acompaña y nos capacita para vivir conforme a su propósito. No importa el pasado ni las limitaciones; lo que importa es quién camina con nosotros y la promesa de que nunca nos dejará igual. [73:57]
Youtube Chapters
- [00:00] - Welcome
- [32:38] - Reconociendo el temor en la comunidad
- [33:59] - Nuestra esperanza está en Dios
- [37:27] - Seguridad y provisión en Cristo
- [40:22] - ¿Quién eres? Identidad y llamado
- [42:33] - Moisés y las excusas ante Dios
- [46:10] - Luchando con la insuficiencia
- [48:39] - La respuesta de Dios: “Yo estaré contigo”
- [50:46] - Etiquetas, pasado y verdadera identidad
- [52:44] - El dolor del pasado y la paternidad
- [54:56] - Dios puede usar a cualquiera
- [57:45] - Dios no responde a excusas, responde con presencia
- [62:09] - Deja de redefinirte: Dios te diseñó
- [69:04] - Dios busca disposición, no perfección
- [73:57] - Identidad y transformación en la presencia de Dios
- [77:09] - Invitación a recibir identidad en Cristo
- [79:14] - Tiempo de oración y entrega
