### Summary
En el sermón de hoy, exploramos una visión celestial revelada al apóstol Juan en el libro de Apocalipsis. Juan es invitado a ver un trono en el cielo, rodeado de seres vivientes y ancianos que adoran a Dios sin cesar. Esta visión nos recuerda la majestad y la santidad de Dios, y cómo toda la creación le rinde honor y gloria. En medio de esta adoración, se presenta un libro sellado que nadie puede abrir, excepto el León de la tribu de Judá, quien resulta ser un Cordero inmolado. Este Cordero, Jesucristo, es digno de recibir poder, riquezas, sabiduría, fortaleza, honra, gloria y alabanza porque con su sangre nos ha redimido.
La visión celestial nos lleva a reflexionar sobre nuestra adoración y nuestra dignidad ante Dios. No somos dignos por nosotros mismos, pero Cristo nos ha hecho dignos a través de su sacrificio. Se nos invita a unirnos a la adoración celestial, reconociendo que todo lo que somos y tenemos es por y para Dios. Este acto de adoración se manifiesta también en la Cena del Señor, donde recordamos el sacrificio de Cristo y proclamamos su muerte hasta que Él venga.
Además, se nos exhorta a vivir de manera que nuestra conducta abra puertas para el evangelio. Nuestra vida debe ser un testimonio que invite a otros a conocer a Cristo. En el contexto del matrimonio, se nos llama a las esposas a ser respetuosas y a los esposos a tratar a sus esposas con honor y delicadeza. Este comportamiento no solo glorifica a Dios, sino que también puede ganar a los no creyentes para Cristo.
Finalmente, se nos recuerda que nuestra conducta en general debe ser compasiva, misericordiosa y amigable, no devolviendo mal por mal, sino bendiciendo a aquellos que nos maldicen. Este testimonio de vida justa y piadosa es una poderosa herramienta para atraer a los incrédulos al reino de Dios.
###
Key Takeaways
- 1. La Majestad de Dios y la Adoración Celestial: La visión de Juan en Apocalipsis nos muestra un trono celestial donde Dios es adorado sin cesar. Esta imagen nos recuerda la santidad y la majestad de Dios, y cómo toda la creación le rinde honor y gloria. Nos invita a unirnos a esta adoración celestial, reconociendo que todo lo que somos y tenemos es por y para Dios. [31:21]
- 2. El Sacrificio de Cristo y Nuestra Dignidad: El Cordero inmolado, Jesucristo, es el único digno de abrir el libro sellado. Su sacrificio nos ha redimido y nos ha hecho dignos ante Dios. No somos dignos por nosotros mismos, pero Cristo nos ha hecho dignos a través de su sangre. Este acto de redención nos invita a vivir en gratitud y adoración constante. [36:27]
- 3. La Cena del Señor como Recordatorio: La Cena del Señor es un momento para recordar el sacrificio de Cristo y proclamar su muerte hasta que Él venga. Nos invita a detenernos regularmente y reflexionar sobre el cuerpo y la sangre de Cristo, reconociendo que su sacrificio nos ha dado vida. Este acto de comunión nos une como iglesia y nos recuerda nuestra redención. [37:22]
- 4. Conducta que Abre Puertas para el Evangelio: Nuestra conducta puede abrir o cerrar puertas para el evangelio. En el contexto del matrimonio, se nos llama a las esposas a ser respetuosas y a los esposos a tratar a sus esposas con honor y delicadeza. Este comportamiento no solo glorifica a Dios, sino que también puede ganar a los no creyentes para Cristo. [55:02]
- 5. Vivir Justamente y Bendecir a los Enemigos: Se nos exhorta a vivir de manera compasiva, misericordiosa y amigable, no devolviendo mal por mal, sino bendiciendo a aquellos que nos maldicen. Este testimonio de vida justa y piadosa es una poderosa herramienta para atraer a los incrédulos al reino de Dios. Nuestra conducta debe reflejar la obra de Cristo en nosotros y ser un testimonio vivo de su amor y gracia. [56:39]
### [56:39]
Youtube Chapters
- [00:00] - Welcome
- [31:21] - La Majestad de Dios y la Adoración Celestial
- [36:27] - El Sacrificio de Cristo y Nuestra Dignidad
- [37:22] - La Cena del Señor como Recordatorio
- [55:02] - Conducta que Abre Puertas para el Evangelio
- [56:39] - Vivir Justamente y Bendecir a los Enemigos